Escuchar a la naturaleza
Un milagro dentro de la catástrofe en el sudeste asiático
Métodos ancestrales salvan de las olas gigantes a primitivas tribus indias.Son pueblos aborígenes que tienen una antigüedad de entre 20 mil y 60 mil años.Percibieron el peligro inminente a través de señales biológicas, como el canto de los pájaros y el cambio de conducta de animales marinos. Por eso, se adentraron en el tupido bosque y se guarecieron de los tsunamis.Gracias a métodos ancestrales de detección de cambios en la naturaleza, las seis tribus primitivas que habitan las islas de Andaman y Nicobar sobrevivieron a los tsunamis (olas gigantes) que arrasaron el sudeste asiático y ya mataron a más de 150 mil personas,según estimaciones de la ONU. Los aborígenes del archipiélago indio de Andaman y Nicobar, situado en el Golfo deBengala, sabían que un desastre iba a ocurrir en la zona, según V.R. Rao, director de la Inspección Antropológica de la India (ASI). “Los tribales perciben un peligro inminente a través de señales biológicas como el canto de los pájaros y el cambio en los patrones de conducta de los animales marinos”, afirmó Rao. Según Rao, los aborígenes se adentraron en los bosques del interior de la isla en busca de seguridad y por eso no hubo víctimas entre las comunidades de los jarwas, onges, shompens, sentenaleses y granandamaneses. Estas tribus datan del alto paleolítico y del mesolítico, por lo que tienen una antigüedad de entre 20 mil y 60 mil años. La tribu de los nicobareses, sin embargo, que data del neolítico (hace entre 5.000 y 7.000 años) y que habita en 12 de las islas del archipiélago indio, incluyendo la devastada Car Nicobar, sí perdió a varios de sus miembros. La agencia de noticias india PTI indicó que al menos 656 nicobareses murieron en la catástrofe y que unos 3.000 de éstos aborígenes se encuentran desaparecidos, pero dado que este grupo tribal está compuesto por cerca de 30.000 personas, a pesar de las grandes pérdidas humanas, su supervivencia no estaría amenazada. Minorías tribalesOtros grupos tribales son mucho más pequeños, como los shompenes, la única tribu mongoloide de la región, que tiene una población de unas 200 personas, o los jarwas, que son unos 270, y la tribu de los onges, formada por 100 personas, lo que había hecho temer a la ASI por su supervivencia. Durante la pasada semana la ASI estuvo trabajando para evaluar el daño causado a estas tribus, algunas de ellas hostiles al contacto exterior, que considera “el eslabón perdido con las civilizaciones tempranas”.Rao informo de que “las áreas del los jarwas y los shompens están intactas” puesto que estas tribus habitan en los bosques del interior, y mostró su preocupación por la situación de los sentenaleses, ya que las olas gigantes dejaron muy dañadas las reservas marítimas que sirven de subsistencia a esta comunidad. “El surgimiento de tierra en la isla de Sentenel Norte no permite a los sentenaleses recoger los recursos marítimos. Los equipos de asistencia tendrán que concentrarse en este aspecto”, agregó el director de la ASI. Esta organización propuso que se estudien y documenten de inmediato los conocimientos ancestrales que ayudaron a los aborígenes a detectar la catástrofe, para que otras poblaciones costeras puedan usarlos en el futuro.Más de 10 mil personas murieron en la India por los tsunamis, que causaron más de 150 mil muertos en 12 países del sudeste asiático y la costa oriental africana.